Lucentum 89-Breogán 86: La victoria es lo único bueno

Victoria del Lucentum ante un Breogán que tuvo el partido en sus manos a falta de pocos minutos, en un partido verdaderamente desquiciante y atolondrado.

El primer cuarto comenzó con los dos equipos corriendo sin parar de lado a lado y anotando, pero luego el Lucentum encontró su 5ª velocidad tradicional y consiguió romper el partido con un marcador de 20-8 si no recuerdo mal, pero como nuestro equipo es absolutamente monotemático, en cuanto el Breogán se ha puesto un poco serio en defensa y no nos ha permitido correr, pues como siempre, se acaba lo que se daba, nos jugamos ataques en 7 segundos que ya no entran o bien nos encontramos con una defensa estática que no sabemos como atacar, en definitiva, que el parcial al garete y 30-26 al descanso.

El resto de partido pues más o menos se puede resumir en muchas pérdidas por nuestra parte en ataques acelerados, atascos frenta a defensas bien posicionadas y sin claridad de ideas en estático, y sobrevivir a base de triples y las individualidades de Fisher y Bennerman que fueron los únicos que tiraron del carro.

El último cuarto pudo ser fatal, cuando se pusieron hasta 7 arriba, pero al final, las individualidades pudieron igualar el partido y decantarlo de nuestro lado.

Destacar que la última jugada de Bennerman a falta de 19 segundos con marcador 86-86 bien pudo costarnos el partido, ya que cogió un rebote a falta de 17 segundos, y en lugar de serenar y aprovechar esos segundos para evitar que ellos tuvieran una última oportunidad se echó para adentro y sacó la falta, y luego Ordín tuvo la ocasión, aunque la jugó mal.

A mí me preocupa la poca lucidez en ataque y la sensación de anarquía, de improvisación y de falta de movimientos ante defensas bien plantadas. Por otra parte, me queda la sensación de que por calidad de los jugadores no es, ya que basta con ver la efectividad que pueden tener en situaciones claras. Así que cada uno saque sus conclusiones.

De todas maneras, lo importante es ganar y se consigue, ahora bien, el juego del equipo ha hecho que por las gradas la gente hable de entrar en el playoff, y ya casi nadie se plantea el poder ser líderes de la fase regular.

UNO A UNO:

FISHER: Soberbio, cuando tiene el día tiene el día, estuvo muy acertado y con total confianza, 29 puntos, con buenos porcentajes 5 de 8 en tiros de 2 y 4 de 6 triples, 3 rebotes y 4 faltas recibidas, para 27 de valoración.

DUMAS: Algo precipitado en algunas ocasiones, tuvo 4 pérdidas, cosa poco habitual, pero aportó varias penetraciones interesantes y además jugó en la fase final junto a Fisher, haciendo que el americano estuviera más liberado de la función de base.

DIGBEU: 14 minutos y no aportó nada, estaba tocado y simplemente dio respiro a los aleros de pistas.

BENNERMAN: Mejor actitud que otras ocasiones, pero marcada por su acierto, es un killer, cuando está en racha demuestra tener buena mano. Destacar sus 10 rebotes que demuestran que estuvo concentrado y metido en el partido.

WEIGAND: Jugó tocado y se fajó lo que pudo, echandole narices, como suele ser habitual en él.

GEORGE: Muy activo el tiempo que estuvo en pista, aportó 8 puntos y 3 faltas recibidas.

WALESKOWSKI: Se le echó en falta, no estuvo bien, solo 1 canasta y 3 rebotes es poco para lo que se espera de él.

COPPENRATH: Estuvo activo, participó en muchas jugadas, es una lástima que falle canastas fáciles bajo del aro, aún así sumó 12 puntos y 7 rebotes. Mejor que las últimas jornadas, pero debe mejorar y demostrar más rabia en la pista.

NOREL: Ninguna canasta de campo y 5 rebotes, poca aportación hoy del bueno de Henk.

EL BLOQUE:

Hoy hemos vivido casi exclusivamente de nuestros exteriores (22 canastas) frente a la poca efectividad del juego interior (10 canastas). Destacar que hoy hemos tenido la ausencia de Lucio y eso siempre se nota, porque aunque no sea extracomunitario, por calidad y sueldo es el auténtico jugador franquicia de este equipo.